Los
volcanes y la protección de la salud
Los principales
riesgos para la salud
América
Latina y el Caribe es una región de alto riesgo ante erupciones
volcánicas. En el Siglo XX, un 76% de las muertes causadas por
erupciones volcánicas ocurrieron en países de la región,
así como, en los últimos 10 años, sucedieron la mitad
de las erupciones más fuertes en el mundo.
Cada volcán
presenta sus propios riesgos específicos y cada riesgo puede tener
un significado diferente e implicar otras actividades de preparación
sanitaria.
- Lava
Contrariamente a lo que en general se piensa, los flujos de lava avanzan
muy lentamente y no constituyen un peligro significativo durante la
actividad volcánica.
- Rocas y detritos
A pesar de que un volcán activo puede despedir rocas a distancias
largas, la posibilidad de que esto ocasione lesiones es baja.
- Cenizas
Efectos directos de las cenizas volcánicas, como aquellos en
las personas con afecciones en las vías respiratorias, pocas
constituyen problemas graves para la salud pública.
- Contaminación
de fuentes de agua
La presencia de agua proveniente de manantiales o ríos situados
sobre el volcán, de lluvia ácida y de ceniza puede generar
problemas sanitarios ya que causan riesgos para la potabilidad del agua.
Es importante un monitoreo estricto por parte del sector salud.
- Gases
Únicamente en pocos casos, ciertos gases relativamente pesados
producen muertes debido a la contaminación del aire en áreas
donde hay gente. Afortunadamente, en la mayoría de las erupciones,
los vientos que soplan sobre el cráter dispersan rápidamente
estos gases.
- Tsunamis
Cuando un volcán está cubierto de agua, puede causar tsunamis:
olas de enorme altura. El riesgo que esto ocurra es bajo, pero tan grave
que no puede pasarse por alto.
- Nubes ardientes
(flujos piro clásticos)
Las corrientes de rocas ardientes, cenizas y aire que avanzan muy rápidamente,
se denominan flujos piro clástico, causantes aproximadamente
del 60% de las muertes por erupciones volcánicas en América
Latina y el Caribe. En el trayecto directo de una nube ardiente, no
existe la posibilidad de sobrevivir. La evacuación es la única
solución.
- Corrientes
de fango y detritos
Los corrientes de fango o detritos causan el 42% de las víctimas
por erupciones volcánicas registradas en el mundo. Los glaciares
de las cumbres, bajo el calor intenso de la erupción, comienzan
a derretirse. Los escurrimientos de lodos enormes, mezclados con detritos
dejan escaso tiempo de evacuación y pueden arrasar ciudades enteras.
Planificación para emergencias volcánicas
En la planificación
para emergencias volcánicas es necesario poner los riesgos en perspectiva
y concentrarse en los que de verdad supone un grave reto para la salud
pública.
Una vez que se dispone
de los insumos referentes a las zonas de riesgo, a las probabilidades
de qué tipo de actividad volcánica y a las vulnerabilidades
existentes en las comunidades en riesgo; se deben elaborar planes para
determinar qué se haría en caso de una erupción previsible
y de las situaciones hipotéticas que podría generar una
erupción.
Hay que estar conciente
que durante y después de una erupción, a menudo los caminos
de acceso a comunidades quedan bloqueados, los servicios básicos
interrumpidos y a veces los recursos humanos y físicos con que
se contaban no están disponibles.
La mejor manera para
evitar mayores desgracias es no permitiendo que comunidades se asienten
cerca de los volcanes. Pero, cuando estas ya se encuentran cerca de un
volcán, que muestra signos de actividad, el mejor plan es la evacuación
temprana de las poblaciones a sitios alejados de las zonas expuestas.
El plan del sector
salud ante emergencias ocasionadas por erupciones volcánicas, debe
contemplar las siguientes medidas:
- Atención
médica
La planificación de la atención médica incluye:
planes sobre búsqueda y rescate, atención de heridos en
masa, monitoreo cuidadoso de la calidad del aire y el agua, evaluación
de los perjuicios a la salud y de las necesidades sanitarias, vigilancia
epidemiológica y el abordamiento de problemas de salud mental.
- Manejo de suministros
Se deben contemplar todos los equipos y materiales que serán
necesarios durante y después de una erupción volcánica.
A diferencia de otros desastres estos incluyen las máscaras livianas
que protegen contra las lluvias de ceniza.
- Manejo de la
información y capacitación
La adecuada información pública es fundamental para evacuaciones
masivas. Todas las personas necesitan estar informadas sobre medidas
de protección, incluyendo información específica
para personas con enfermedades en las vías respiratorias. La
información no debe contemplar únicamente los efectos
directos de las erupciones volcánicas, sino también los
indirectos, como la contaminación de agua potable.
El plan debe incluir
procedimientos de capacitación permanente para los funcionarios
del sector salud y de rescate para que conozcan todos los aspectos de
atención médica arriba mencionados.
Finalmente, cabe destacar
que el plan debe ser probado, ejercitándolo con el personal médico
y verificar si se sienten cómodos y preparados. El plan se debe
actualizar periódicamente para incorporar los cambios de recursos
y de personal.
De la guía:
Los Volcanes y la Protección de la Salud, 2002
Organización Panamericana de la Salud/ Organización Mundial
de la Salud.
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