Foto: © J. Jenkins - OPS/OMS
La Campaña Mundial 2008-2009 para la Reducción de Desastres: “Hospitales Seguros frente a los Desastres: Reducir el Riesgo, Proteger las Instalaciones de Salud, Salvar Vidas”.
Durante estos dos años, la secretaría de la Estrategia Internacional de las Naciones Unidas para la Reducción de Desastres (UNISDR) y la Organización Panamericana de la Salud / Organización Mundial de la Salud (OPS/ OMS), La Federación Internacional de las Sociedades de la Cruz Roja y la Media Luna Roja (IFRC), UNICEF y Plan International con el apoyo del Fondo Global del Banco Mundial para la Reducción de Desastres y la Recuperación (GFDRR) han llevado a cabo actividades en nuestra región con gobiernos, organismos regionales e internacionales y organizaciones no gubernamentales, para incrementar la conciencia acerca de cómo y por qué se deben redoblar los esfuerzos para proteger las instalaciones de salud y velar por su funcionamiento durante y después de la ocurrencia de desastres y situaciones de emergencia.
Se han coordinado acciones concretas para diseminar información, sensibilizar a tomadores de decisiones, personal médico, académicos, estudiantes y a la población en general sobre la importancia de contar con hospitales que sean seguros ante la ocurrencia de eventos naturales adversos. Se han realizado talleres y conferencias sobre el tema, del mismo modo se han creado productos y herramientas como el Índice de Seguridad Hospitalaria, el DVD “Viaje Virtual por un Hospital Seguro”, un Rotafolio sobre Hospitales Seguros para uso en la comunidad y se ha organizado un concurso de fotografía y reportaje en torno a la Campaña. Numerosas publicaciones en sitios web y diarios han sido escritas en todo el continente y de igual forma se ha celebrado el día Internacional de Reducción de Desastres 2008 con actividades relacionadas con la actual campaña en varios países de la región, y la OPS dedicó el Día Mundial de la Salud 2009 al tema de hospitales seguros, reforzando así los objetivos de la campaña y logrando mayor visibilidad para el tema.
La importancia de los hospitales y de todos los tipos de instalaciones de salud va más allá de su función directa de salvar vidas. Estos también son poderosos símbolos del progreso. La Campaña 2008-2009 de Reducción de Desastres ha trabajado primordialmente en llevar a cabo acciones que conduzcan a proteger la vidas de los pacientes y de los trabajadores de salud, promoviendo el reforzamiento de la estructuras de las instalaciones médicas. Ha permitido que las instalaciones y los servicios de salud puedan funcionar después de una situación de emergencia o de desastre, que es cuando más se necesitan; y ha mejorado las capacidades de los trabajadores y de las instituciones de salud para reducir el riesgo. Igualmente se ha trabajado en sensibilizar a las personas sobre sus derechos a contar con hospitales seguros y la importancia de éstos dentro de las comunidades.
Como principal lección de la Campaña podemos rescatar que el hospital más caro es el que falla; los nosocomios y las instalaciones de salud representan una enorme inversión para cualquier país. Su destrucción impone una importante carga económica. Todos los desastres representan un problema de salud y cualquier daño a los sistemas de salud afecta a todos los sectores de la sociedad y a las naciones en conjunto.
Es posible proteger de los desastres a las instalaciones de salud más importantes incluyendo la reducción del riesgo en el diseño y en la construcción de todas las nuevas instalaciones de salud, y al reducir la vulnerabilidad en las ya existentes mediante la selección y el reacondicionamiento. Los trabajadores de salud son agentes esenciales en la identificación de posibles riesgos a la salud a consecuencia de las amenazas y en la promoción de medidas para reducir el riesgo, tanto en el plano personal como en el comunitario. Sin dejar a un lado que las personas que conforman las sociedades son los principales gestores de la prevención de los desastres, las comunidades organizadas, informadas y preparadas tienden a ser las más resilientes y con mayor capacidad de recuperación cuando ocurren desastres.