Plataforma temática de Riesgo Urbano para Latinoamérica y el Caribe: Una herramienta regional de la Campaña Mundial Desarrollando ciudades resilientes: "Mi ciudad se está preparando"

Foto: © J. J. Trelles

Preámbulo

Durante las últimas décadas en los países y territorios de Latinoamérica y el Caribe, se han registrado progresos y realizado ingentes esfuerzos por alcanzar los objetivos trazados en el Marco de Acción de Hyogo 2005-2015 para el aumento de la resiliencia de las naciones y las comunidades ante los desastres. Sin embargo, estos esfuerzos no han sido capaces todavía de frenar el impacto negativo de los efectos del cambio climático, que está generando un incremento sostenido de la severidad y recurrencia de los eventos de origen hidrometeorológico sobre la región. A esto se suma el alto riesgo sísmico que, sólo en 2010, se ha cobrado cientos de miles de muertos, desaparecidos y heridos y ha afectado a más de 2 millones de personas a través del impacto de los terremotos acaecidos en Haití y Chile. Además, la creciente vulnerabilidad originada por procesos de desarrollo inadecuados ha generado, tanto a nivel global como hemisférico, que la mayor parte de la población viva hoy día en ciudades o centros urbanos que, si bien desempeñan un papel esencial en el desarrollo social y económico de los países de la región, son los entornos más críticos en cuanto a la gestión y reducción del riesgo de desastres. Todo ello hace que, independientemente de los innumerables esfuerzos y recursos destinados a la ejecución de acciones en torno a las cinco prioridades establecidas en el Marco de Acción de Hyogo para la reducción de riesgo de desastres, nos encontremos ante nuevos retos que demandan una rápida acción dirigida tanto a la adaptación al cambio climático como a la reducción del riesgo de desastres, con especial énfasis en el ámbito de los gobiernos locales.

Las autoridades locales tienen que enfrentarse día a día a la amenaza de los desastres y, por ello, necesitan un mejor acceso a las políticas e instrumentos para enfrentarla de manera eficaz y eficiente, pues son el nivel institucional más cercano a los ciudadanos y, en sus comunidades, la primera línea de respuesta ante situaciones de crisis y emergencia, a la vez que cumplen funciones críticas para el desarrollo, como la planificación del desarrollo urbano y el otorgamiento de permisos de construcción. En definitiva, una débil gobernabilidad urbana y local intensifica las dificultades para abordar el riesgo de desastres y enfrentar sus consecuencias.

Las proyecciones de ONU-Hábitat nos indican que, de aquí al año 2030, la población urbana mundial se incrementará sostenidamente, pudiendo llegar a alcanzar en algunos países de la región hasta un 80% de la población total. Si este aumento de la población y de la densidad en las zonas urbanas viene acompañado de un incremento igualmente sostenido del riesgo urbano, impulsado por factores como una débil gobernanza, desarrollo urbano no planificado, falta de suelo para los ciudadanos de bajos ingresos, construcciones inapropiadas, concentración de activos económicos en zonas de alto riesgo, degradación de ecosistemas, colapso de las redes de servicio e infraestructura esencial, edificaciones de gran altura, entre otros, se agravará lo que, desde la perspectiva de la gobernabilidad y la gestión pública, significa el manejo del riesgo de desastres y, por ende, dificultará el incremento de la resiliencia de los entornos urbanos y sus habitantes.

La reducción del riesgo urbano debe ser un factor esencial en la planificación urbana, pues el impacto de los fenómenos naturales sobre las ciudades es cada vez más costoso en términos de pérdida de vidas y propiedades. Adicionalmente, la reducción del riesgo ofrece oportunidades para inversiones de capital a través de actualizaciones y mejoras de infraestructura, modernizaciones para la eficiencia energética, renovación urbana y el desarrollo de energías más limpias. Por ello, se deben alcanzar acciones que estén a la altura de las dimensiones que ha alcanzado la problemática.

Es indispensable emprender acciones que incrementen sustancialmente las inversiones en reducción del riesgo de desastre. Esto requiere no sólo revisar, analizar y colocar a la disposición de los gobiernos locales instrumentos y herramientas existentes que puedan ser aprovechadas y avanzar en su implementación, sino también identificar coincidencias que permitan avanzar en la determinación de espacios y oportunidades de cooperación y coordinación.

Es por esto que la Estrategia Internacional para la Reducción de Desastres de las Naciones Unidas (UNISDR), conjuntamente con sus socios, lanza la Campaña Mundial para la Reducción de Desastres 2010-2011 "Desarrollando ciudades resilientes: Mi ciudad se está preparando", una campaña dirigida a los ciudadanos, pero que busca lograr que los alcaldes, los gobiernos locales y las autoridades nacionales tomen acciones para establecer ciudades resilientes como parte de los procesos de urbanización sostenible. La campaña pretende generar mayor conocimiento, más y mejores inversiones y construcciones más seguras a través de un plan de acción que se basa en diez aspectos esenciales para construir ciudades resilientes, planteado como una guía para que los gobiernos locales puedan llevar a cabo sus acciones de reducción del riesgo de desastres.

El objetivo de la Campaña "Desarrollando ciudades resilientes: Mi ciudad se está preparando" es, por un lado, conseguir que el mayor número de gobiernos locales estén preparados y, por otro lado, contar con una red participativa de ciudades de diferentes tamaños, características y perfiles de riesgo. En tal sentido, la oficina regional de UNISDR para las Américas ha decidido impulsar la activación de la Plataforma Temática en Riesgo Urbano para la región, concebida como una iniciativa de y para todas las ciudades de Latinoamérica y el Caribe y conformada por los gobiernos locales interesados en fortalecer la incorporación de los 10 aspectos esenciales propuestos por la Campaña para lograr ciudades resilientes, dentro de los procesos de desarrollo de sus ciudades.

La Plataforma apoyará el fortalecimiento de las capacidades de los gobiernos locales para la incorporación de la gestión del riesgo de desastres en los procesos de desarrollo de sus ciudades, ofreciendo un espacio para analizar problemas comunes, intercambiar experiencias y conocimientos, y fortalecer sus propios procesos de gestión del riesgo urbano. Además, se impulsarán iniciativas de cooperación entre ciudades y con otros actores estratégicos para la concreción de prácticas de reducción del riesgo en aplicación del Marco de Acción de Hyogo y otras políticas de desarrollo sostenible.

La Campaña comenzará a sesionar bajo la coordinación pro tempore de la Alcaldía Mayor de Bogotá, y con el apoyo de la oficina regional de la UNISDR para las Américas, un grupo experto asesor y un grupo de actores institucionales, técnicos y comunitarios que contribuirán a dinamizar el flujo de información y enriquecerán y promoverán la difusión e intercambio de iniciativas y experiencias, con énfasis en el nivel local y nacional pero sin excluir lo regional e internacional. Al mismo tiempo, funcionará como punto de encuentro para la evaluación de los progresos en función de los aportes y avances logrados en los objetivos estratégicos y prioridades previstas en el Marco de Acción de Hyogo, midiendo los progresos en la institucionalización y aplicación de la reducción de riesgos de desastres en los procesos de desarrollo local con base en el conocimiento del nivel de impacto de los logros alcanzados para cada uno de los 10 puntos esenciales de la Campaña 2020-2011 en las siguientes áreas estratégicas: incidencia política, concientización ciudadana, generación de capacidades, coordinación entre niveles locales, regionales y nacionales y gestión con organismos internacionales.

Al promover la coordinación de esfuerzos y el establecimiento de nuevas asociaciones estratégicas en los gobiernos municipales, con el apoyo de las agencias intergubernamentales y organismos internacionales, se fortalecerá la Plataforma Regional para la Reducción del Riesgo de Desastres de las Américas y se podrán reducir las pérdidas ocasionadas por los desastres en las comunidades y los países de la región latinoamericana y del Caribe. Para ello, son necesarios el liderazgo de los gobiernos locales, la estrecha colaboración de los participantes comunitarios, el fortalecimiento de las capacidades regionales, nacionales y locales para la coordinación y el apoyo a los programas, y el apoyo de la UNISDR y sus socios.

Invitamos a todos a participar en la Campaña Mundial "Desarrollando ciudades resilientes: Mi ciudad se está preparando" y a promover la Plataforma Temática en Riesgo Urbano para América Latina y el Caribe, con el fin de lograr un compromiso real y decidido con la Reducción de Riesgo de Desastres por parte de los gobiernos locales y, de esta forma, lograr ciudades resilientes comprometidas con la urbanización sostenible.

Para mayor información contactar a:
Magnolia Santamaría
Consultora UNISDR
Plataforma de Riesgo Urbano
riesgourbano@eird.org